Ya van Rucio y Rocinante
por los caminos rodando
y el Teatro llevan a lomo
en su trotar trepidante.

Rocinante va contento
y Rucio muy entusiasmado
con sus sendos escenarios
por parajes mexicanos.

“¡Rucio, amigo!”. “¡Rocinante,
mi cómplice temerario!”
Piropos se van mentando.

¡Compañeros de combate,
Rocinante y Rucio, heraldos
del magno Teatro y del Arte!

domingo, 5 de febrero de 2012

Bajo el cobijo de Rocinante...




...en la soleadísima Ciudad Hidalgo!

1 comentario:

  1. ESE ES MI RANCHOOOOOO PUES, AHÍ NACÍ, MERO... ESPERO LOS TRATEN BIEN Y TENGAN UNA GÜENA ESTANCIA Y FUNCIONES... SALUUUDOOOSSS RUCIOROCINANTES...

    ResponderEliminar

Comenta y Participa